ANTECEDENTES HISTORICOS DE VANDALIA
La Historia es solo una, la de los hechos que acontecieron en el pasado, con unos claros intentos de sesgar toda la información pública por parte de los que intervienen en dicha serie de acontecimientos de forma activa, pero la realidad histórica no deja de ser solo una.
La identidad diferencial de VANDALIA nace con el Reino de Tartessos allá en el Siglo XLV de la Era Indo-Europea (XII A.C.) con una fundación mitológica por parte del rey Gerión, nieto de Poseidón, poseedor del rebaño de rojos bueyes y que robará Heracles en su 10º trabajo.
Una comunidad popular de ascendencia ibérica, gobernada por una aristocracia de muy claro origen céltico, protocéltico lusitano, fuertemente iberizada. El marco geográfico de dominio político e irrigación cultural se localiza por todo el sur peninsular, desde el Algarbe portugués hasta la zona murciano-levantina española, con una expansión por la costa norteafricana en la zona del estrecho, tanto en la fachada atlántica como en la cara mediterránea.
La desaparición política vino dada por la conquista cartaginesa del territorio, a causa de las Guerras Púnicas entre Cartago y Roma. También por causa de dichas guerras dieron comienzo al dominio romano en la Península Ibérica, al cual colaboraron de una forma decisiva los iberos del sur para poder sacudirse la cruel dominación cartaginesa. Siglos L E. I-E. (Fenicios), LII E. I-E. (Cartagineses), LIII E. I-E. (Romanos).
La independencia territorial y política no se recuperó hasta la llegada de pueblos de etnia germánica, vándalos, y escito-sármata, alanos, los primeros dominaron en toda la vieja provincia romana de la Bética y los segundos en el sur de Lusitania y Cartaginense. A la muerte del rey alano Adax, por los visigodos (5926 E. I-E.), el pueblo alano tomó por su rey al del pueblo vándalo, Gunderico de la nobleza Asdinga (año 5925 E. I-E.) sobre el pueblo Silingo (su rey Fredebaldo muerto en 5925), conocido a partir de la unificación (5927 E. I-E.) como REX WANDALORUM ET ALANORUM. Uno, y solo uno, REX para la tierra de VANDALIA, para los dos pueblos de los vándalos, 40%, y alanos, 60%, unidos, más los hispanos, herederos de la antigua Tartessos; un periodo convulso en un reino efímero, un nombre para la memoria y para la tierra. Siglo LX E. I-E. (V D. C.).
Con el paso del pueblo VANDALIO de vándalos y alanos al norte de África, expulsados por los visigodos, y para conquistar un imperio, nuestra tierra volvió a perder esa unidad independiente, para volver a la previa división territorial romana, dentro del reino de los visigodos. Pero no se perdió la mítica VANDALIA, como recuerdo añorado para los del pueblo de aquellos que le dieron nombre y fama, en sus nuevas tierras africanas como ya más adelante comprobaremos.
En el Siglo LXII E. I-E., año 6219, se produjo el colapso definitivo de toda la monarquía visigoda, por causa de una triple traición, dentro de luchas dinásticas, en la sucesión a la monarquía de nuestra Hispania. La traición de los hijos de Vitiza al rey, llamando a unos mercenarios islamitas, de mayoría berberisca comandados por una elite árabe, para ellos conquistar el trono de su padre, dentro de la electiva monarquía visigoda, en manos del rey Rodrigo. La traición de los vitizanos, no declarados, en el ejército del rey Rodrigo, el cual se enfrenta a las tropas de Tariq en la Batalla de Guadalete, cuando se pasan al otro bando rebelde-“invasor” y causan la derrota del rey legítimo. La traición de Tariq a estos vitizanos, al proclamar en la capital del reino, Toledo, como rey hispánico al mismísimo Califa de Damasco, y no al príncipe visigodo a cuyo servicio pagado él había cruzado el Estrecho de Calpe y Abila (las Columnas de Hércules) según lo pactado. Aquello que no habían conseguido los islamitas a finales del siglo anterior y principios de ese, tomar los territorios visigodos en el Norte de África, e incluso invadir el sur peninsular, lo habían recibido casi regalado, por medio de la traición entre hermanos y a la palabra dada, con una tropa inferior a los 40000 combatientes.
Una “invasión” musulmana con un número tan escaso de tropas y en un periodo de siete años (Batalla de Covadonga, 6226 E. I-E.), no se puede explicar sin recurrir a la traición vitizana al rey, la colaboración de la población judía en las ciudades de Hispania, aparte de la práctica indiferencia de los hispanos ante un cambio de pueblo dominante por otro. Una época de crisis, con pérdida de los valores, como todas.
Ahora hay un ánimo de revancha, por parte de españoles de VANDALIA, que mitifican un pasado de nuestra tierra, cuando era la llamada Al-Andalus y de religión musulmana. Al-Andalus por VANDALIA, así llamaban las tribus berberiscas (vándalos: ausencia de la “v” original en el idioma, genitivo u+andalos; tierra de los vándalos, tamort uandalos, termina siendo”tierra de los ándalos”, tamort u-andalos) a la Península Ibérica desde su sometimiento a los VANDALIOS, tres siglos antes, y sus dominadores orientales, sirios y árabes. ¿Quién financia estas veleidades islamizantes? ¿Petrodólares e integrismos de islámicos quizás? También pueden llorar por el sur de Francia e Italia y toda la europea Península Balcánica hasta las puertas de Viena, por poder, pueden hacerlo, pero….
VANDALIA ya tenía más de 2000 de historia y cultura prerromana, romana, y visigoda cuando llegaron esos millares de norteafricanos, comandados por orientales, a Hispania, unos conquistadores que no pudieron aportar grandes novedades culturales pues ellos no las tenían. Está más que demostrado y probado el hecho de ser una continuidad, este arte hispano-musulmán, de las tradiciones artísticas propias de los hispanos y visigodos de la Bética y la Cartaginense, como las yeserías y el arco de herradura; también esta probada la destrucción del Templo de Hércules, en Gades, buscando perdidos tesoros escondidos inexistentes, a manos de estos berberiscos y orientales. Aparte de muchos conocimientos tomados en otras tierras y pueblos: indios, griegos, romanos y etc.
Fueron los hispanos, conversos al islamismo, atraídos por muchas ventajas fiscales, los creadores del arte hispano-musulmán, como una continuación de su arte y cultura en una adaptación religiosa. Como prueba una pregunta: ¿Qué contribución cultural, con origen la cultura islámica, nos han procurado a la especie humana desde su salida de España en el Siglo LXX E. I-E. (XVI D.C.) ? ¡Una larga noche de cerca de medio milenio!
¿Reconquista y Guerras de Religión durante casi ocho siglos? Si, eso fue. ¿Guerras entre etnias? No, en ningún momento, pues nunca existió una invasión como pueblos, solo de unos millares al principio, ¿cien mil contando elites, almohades y almorávides? ¿Qué es esta cifra, frente a más de seis millones de hispanos hechos españoles durante las guerras territoriales y de religión?
Castilla del Sur era nuestra tierra para algunos conquistadores del norte. VANDALIA y Andalucía para algunos de nuestros autores clásicos del Siglo de Oro, junto al Reino de Granada, eran las tierras de nuestro sur patrio, también para la administración del Reino de las Españas.
La reunificación, territorial de VANDALIA, no fue un hecho hasta el año 7341 E. I-E., con la caída del Antiguo Régimen político-administrativo, y consiguiente reordenación, también a nivel provincial y regional (o los antiguos reinos) con los siguientes criterios: Andalucía como nombre, ya contaba con alguna tradición castellana para las provincias occidentales del sur del reino, para efectuar esta reunificación con el Reino de Granada, conservando el escudo granadino su representación conjunta para la nueva Andalucía.
Quizás intervino un miedo latente a despertar una identidad dormida, el conde-duque de Olivares y su reino de Andalucía, al fomentarse un españolismo popular en toda nuestra tierra, como mejor representación del centralismo borbónico, en vez de la monarquía del Imperio federal de los Austrias.
Hispania se refunda en España, con los Reyes Católicos, a la toma de Granada. Una vez España católica, capaz de descubrir y conquistar un continente y un imperio, desde unas naves que partieron desde un puerto de VANDALIA.
No podemos olvidar nuestra historia, nuestra sangre y nuestra cultura, por causa de unas guerras de religión sobre un fondo territorial europeo, forjadoras del genuino carácter de “homo hispanus”: guerrero patrio, conquistador de un imperio transcontinental, señor de los destinos europeos por siglo y medio, artista del “Siglo de Oro” en la eclosión del ser cultural español.
Una bandera de religión, que nadie profesa hoy en nuestra tierra, no puede representar a un pueblo como el de VANDALIA.
Una bandera de los pueblos que nos dieron origen, como pueblo y por el nombre, SI, ya empieza por ser conocida en las tierras de VANDALIA, España y Europa.
Por la sangre de nuestras venas. Por la tierra en la cual nacimos, y al final, en ella se nos acogerá. Por la memoria de aquellos que nos precedieron en la Idea. Aquí existe para ser VANDALIA por su IDENTIDAD y lo ponemos de MANIFIESTO.
BANDERA DE VANDALIA
Sobre un paño en blanco una orla en rojo, en recuerdo de Tartessos. Una cruz, en aspa, roja sobre fondo blanco, en recuerdo de los VANDALIOS que dieron su nombre a esta tierra.
GUERREROS IBEROS MONEDA ALANA (GRIFO Y BANDERA) BANDERA DE LOS VANDALIOS
ESCUDO DE VANDALIA
Recoge el mito ancestral, los trabajos heroicos de Hércules, la separación de Europa de África, al león hispano del león africano, uniendo el Mar Mediterráneo junto al Océano Atlántico, levantando las Columnas de Hércules de Abila en Ceuta y Calpe en el Peñón de Calpe, ahora conocido como Gibraltar. Grecia como cuna de toda Europa.
Escrito, en alfabeto tartesio, el nombre del primer reino peninsular, de nuestra perdida Tartessos, de míticas riquezas, fundada hace más de 3000 años, dentro de una lúnula de los VANDALIOS.
Un Indalo, como primer emblema reconocible en una cultura original de nuestra tierra; una estrella de los vientos, un motivo decorativo de la cerámica ibérica bastetana, y un recuerdo de nuestro ancestral origen en el occidente de Europa.
WOLF, 10/ABRIL/7515
La Historia es solo una, la de los hechos que acontecieron en el pasado, con unos claros intentos de sesgar toda la información pública por parte de los que intervienen en dicha serie de acontecimientos de forma activa, pero la realidad histórica no deja de ser solo una.
La identidad diferencial de VANDALIA nace con el Reino de Tartessos allá en el Siglo XLV de la Era Indo-Europea (XII A.C.) con una fundación mitológica por parte del rey Gerión, nieto de Poseidón, poseedor del rebaño de rojos bueyes y que robará Heracles en su 10º trabajo.
Una comunidad popular de ascendencia ibérica, gobernada por una aristocracia de muy claro origen céltico, protocéltico lusitano, fuertemente iberizada. El marco geográfico de dominio político e irrigación cultural se localiza por todo el sur peninsular, desde el Algarbe portugués hasta la zona murciano-levantina española, con una expansión por la costa norteafricana en la zona del estrecho, tanto en la fachada atlántica como en la cara mediterránea.
La desaparición política vino dada por la conquista cartaginesa del territorio, a causa de las Guerras Púnicas entre Cartago y Roma. También por causa de dichas guerras dieron comienzo al dominio romano en la Península Ibérica, al cual colaboraron de una forma decisiva los iberos del sur para poder sacudirse la cruel dominación cartaginesa. Siglos L E. I-E. (Fenicios), LII E. I-E. (Cartagineses), LIII E. I-E. (Romanos).
La independencia territorial y política no se recuperó hasta la llegada de pueblos de etnia germánica, vándalos, y escito-sármata, alanos, los primeros dominaron en toda la vieja provincia romana de la Bética y los segundos en el sur de Lusitania y Cartaginense. A la muerte del rey alano Adax, por los visigodos (5926 E. I-E.), el pueblo alano tomó por su rey al del pueblo vándalo, Gunderico de la nobleza Asdinga (año 5925 E. I-E.) sobre el pueblo Silingo (su rey Fredebaldo muerto en 5925), conocido a partir de la unificación (5927 E. I-E.) como REX WANDALORUM ET ALANORUM. Uno, y solo uno, REX para la tierra de VANDALIA, para los dos pueblos de los vándalos, 40%, y alanos, 60%, unidos, más los hispanos, herederos de la antigua Tartessos; un periodo convulso en un reino efímero, un nombre para la memoria y para la tierra. Siglo LX E. I-E. (V D. C.).
Con el paso del pueblo VANDALIO de vándalos y alanos al norte de África, expulsados por los visigodos, y para conquistar un imperio, nuestra tierra volvió a perder esa unidad independiente, para volver a la previa división territorial romana, dentro del reino de los visigodos. Pero no se perdió la mítica VANDALIA, como recuerdo añorado para los del pueblo de aquellos que le dieron nombre y fama, en sus nuevas tierras africanas como ya más adelante comprobaremos.
En el Siglo LXII E. I-E., año 6219, se produjo el colapso definitivo de toda la monarquía visigoda, por causa de una triple traición, dentro de luchas dinásticas, en la sucesión a la monarquía de nuestra Hispania. La traición de los hijos de Vitiza al rey, llamando a unos mercenarios islamitas, de mayoría berberisca comandados por una elite árabe, para ellos conquistar el trono de su padre, dentro de la electiva monarquía visigoda, en manos del rey Rodrigo. La traición de los vitizanos, no declarados, en el ejército del rey Rodrigo, el cual se enfrenta a las tropas de Tariq en la Batalla de Guadalete, cuando se pasan al otro bando rebelde-“invasor” y causan la derrota del rey legítimo. La traición de Tariq a estos vitizanos, al proclamar en la capital del reino, Toledo, como rey hispánico al mismísimo Califa de Damasco, y no al príncipe visigodo a cuyo servicio pagado él había cruzado el Estrecho de Calpe y Abila (las Columnas de Hércules) según lo pactado. Aquello que no habían conseguido los islamitas a finales del siglo anterior y principios de ese, tomar los territorios visigodos en el Norte de África, e incluso invadir el sur peninsular, lo habían recibido casi regalado, por medio de la traición entre hermanos y a la palabra dada, con una tropa inferior a los 40000 combatientes.
Una “invasión” musulmana con un número tan escaso de tropas y en un periodo de siete años (Batalla de Covadonga, 6226 E. I-E.), no se puede explicar sin recurrir a la traición vitizana al rey, la colaboración de la población judía en las ciudades de Hispania, aparte de la práctica indiferencia de los hispanos ante un cambio de pueblo dominante por otro. Una época de crisis, con pérdida de los valores, como todas.
Ahora hay un ánimo de revancha, por parte de españoles de VANDALIA, que mitifican un pasado de nuestra tierra, cuando era la llamada Al-Andalus y de religión musulmana. Al-Andalus por VANDALIA, así llamaban las tribus berberiscas (vándalos: ausencia de la “v” original en el idioma, genitivo u+andalos; tierra de los vándalos, tamort uandalos, termina siendo”tierra de los ándalos”, tamort u-andalos) a la Península Ibérica desde su sometimiento a los VANDALIOS, tres siglos antes, y sus dominadores orientales, sirios y árabes. ¿Quién financia estas veleidades islamizantes? ¿Petrodólares e integrismos de islámicos quizás? También pueden llorar por el sur de Francia e Italia y toda la europea Península Balcánica hasta las puertas de Viena, por poder, pueden hacerlo, pero….
VANDALIA ya tenía más de 2000 de historia y cultura prerromana, romana, y visigoda cuando llegaron esos millares de norteafricanos, comandados por orientales, a Hispania, unos conquistadores que no pudieron aportar grandes novedades culturales pues ellos no las tenían. Está más que demostrado y probado el hecho de ser una continuidad, este arte hispano-musulmán, de las tradiciones artísticas propias de los hispanos y visigodos de la Bética y la Cartaginense, como las yeserías y el arco de herradura; también esta probada la destrucción del Templo de Hércules, en Gades, buscando perdidos tesoros escondidos inexistentes, a manos de estos berberiscos y orientales. Aparte de muchos conocimientos tomados en otras tierras y pueblos: indios, griegos, romanos y etc.
Fueron los hispanos, conversos al islamismo, atraídos por muchas ventajas fiscales, los creadores del arte hispano-musulmán, como una continuación de su arte y cultura en una adaptación religiosa. Como prueba una pregunta: ¿Qué contribución cultural, con origen la cultura islámica, nos han procurado a la especie humana desde su salida de España en el Siglo LXX E. I-E. (XVI D.C.) ? ¡Una larga noche de cerca de medio milenio!
¿Reconquista y Guerras de Religión durante casi ocho siglos? Si, eso fue. ¿Guerras entre etnias? No, en ningún momento, pues nunca existió una invasión como pueblos, solo de unos millares al principio, ¿cien mil contando elites, almohades y almorávides? ¿Qué es esta cifra, frente a más de seis millones de hispanos hechos españoles durante las guerras territoriales y de religión?
Castilla del Sur era nuestra tierra para algunos conquistadores del norte. VANDALIA y Andalucía para algunos de nuestros autores clásicos del Siglo de Oro, junto al Reino de Granada, eran las tierras de nuestro sur patrio, también para la administración del Reino de las Españas.
La reunificación, territorial de VANDALIA, no fue un hecho hasta el año 7341 E. I-E., con la caída del Antiguo Régimen político-administrativo, y consiguiente reordenación, también a nivel provincial y regional (o los antiguos reinos) con los siguientes criterios: Andalucía como nombre, ya contaba con alguna tradición castellana para las provincias occidentales del sur del reino, para efectuar esta reunificación con el Reino de Granada, conservando el escudo granadino su representación conjunta para la nueva Andalucía.
Quizás intervino un miedo latente a despertar una identidad dormida, el conde-duque de Olivares y su reino de Andalucía, al fomentarse un españolismo popular en toda nuestra tierra, como mejor representación del centralismo borbónico, en vez de la monarquía del Imperio federal de los Austrias.
Hispania se refunda en España, con los Reyes Católicos, a la toma de Granada. Una vez España católica, capaz de descubrir y conquistar un continente y un imperio, desde unas naves que partieron desde un puerto de VANDALIA.
No podemos olvidar nuestra historia, nuestra sangre y nuestra cultura, por causa de unas guerras de religión sobre un fondo territorial europeo, forjadoras del genuino carácter de “homo hispanus”: guerrero patrio, conquistador de un imperio transcontinental, señor de los destinos europeos por siglo y medio, artista del “Siglo de Oro” en la eclosión del ser cultural español.
Una bandera de religión, que nadie profesa hoy en nuestra tierra, no puede representar a un pueblo como el de VANDALIA.
Una bandera de los pueblos que nos dieron origen, como pueblo y por el nombre, SI, ya empieza por ser conocida en las tierras de VANDALIA, España y Europa.
Por la sangre de nuestras venas. Por la tierra en la cual nacimos, y al final, en ella se nos acogerá. Por la memoria de aquellos que nos precedieron en la Idea. Aquí existe para ser VANDALIA por su IDENTIDAD y lo ponemos de MANIFIESTO.
BANDERA DE VANDALIA
Sobre un paño en blanco una orla en rojo, en recuerdo de Tartessos. Una cruz, en aspa, roja sobre fondo blanco, en recuerdo de los VANDALIOS que dieron su nombre a esta tierra.
GUERREROS IBEROS MONEDA ALANA (GRIFO Y BANDERA) BANDERA DE LOS VANDALIOS
ESCUDO DE VANDALIA
Recoge el mito ancestral, los trabajos heroicos de Hércules, la separación de Europa de África, al león hispano del león africano, uniendo el Mar Mediterráneo junto al Océano Atlántico, levantando las Columnas de Hércules de Abila en Ceuta y Calpe en el Peñón de Calpe, ahora conocido como Gibraltar. Grecia como cuna de toda Europa.
Escrito, en alfabeto tartesio, el nombre del primer reino peninsular, de nuestra perdida Tartessos, de míticas riquezas, fundada hace más de 3000 años, dentro de una lúnula de los VANDALIOS.
Un Indalo, como primer emblema reconocible en una cultura original de nuestra tierra; una estrella de los vientos, un motivo decorativo de la cerámica ibérica bastetana, y un recuerdo de nuestro ancestral origen en el occidente de Europa.
WOLF, 10/ABRIL/7515