domingo, 5 de octubre de 2008

AÑOS DE ACERO


AÑOS DE ACERO.


Los años de beatitud engañada tocan a su fin. La realidad de los días nos alcanza un poquito más conforme van pasando estos. Los ojos cerrados nunca ocultarán la verdad, a la vista de aquellos contemporáneos conocedores del espíritu de la época. El velo de la mentira comienza su caída parra los ojos de cada vez más compatriotas.

¡Cuidado con los traidores a sueldo del Gran Enemigo!

El hermano equivocado ha de ser tratado como tal, con hostilidad, con respeto y con honor, solo así se podrá conquistar al camarada que anida en lo profundo de sus entrañas. La sangre de todas sus venas nos es muy cara para el devenir común. La maldad de unos actos puede ser conjurada en la compensación de las consecuencias. La mezquindad en muy pocos casos. Una es la posible consecuencia del desconocimiento. La otra es producto del acto voluntario e intencionado.

Tenemos la necesidad de transformar la minoría relativa de número, en una minoría absoluta de calidad. No necesitamos cuerpos y mentes uniformados en la uniformidad. Necesitamos de todo tipo de inteligencias, con una voluntad tanto de poder como de combate, con amor a la vida tanto como ausencia de miedo a la muerte, haciendo verdadero el escrito del pensador de “saber morir justo a tiempo”. Ese es el espíritu del guerrero por su idea y su patria ideal, el da todo a su debido tiempo, para su Comunidad y por su Pueblo, como todos sus antiguos convecinos transformados en camaradas por el bien común de la Comunidad Popular y Nacional.



Llegan los años de acero a una sociedad de cera... Los años del acero, del Martillo trabajador y la Espada justiciera, darán la forma a la cera y la forja a la sociedad, con su temple esculpirán en la piedra nuevos mitos fundacionales que aplasten a mediocres intereses funcionales que ahora aún inspiran cuentos de sociedad.


Suben los espantapájaros por las laderas del vertedero, colector de los escombros y los desechos sociales que no han querido ceder en su idea de un futuro mejor; su mensaje fantasmal apenas ya se deja mitigar por el sonido amenazador de cadenas perpetuas, para todos aquellos que no dejan de oír palabras de paja en cuerpos de andrajos son el ejemplo. Oidores de sonidos huecos, ignoradores del murmullo constante, soñadores de palabras nunca habladas, lectores de ojos comunicantes; estos son mis hermanos de combate allí en las catacumbas marginadas, donde sufrimos al voceador del engaño permanente, el cual de tanto repetir su hueco mensaje, hasta el mismo ya ve su imagen, a imagen y semejanza de su constante mensaje, aun con los ojos abiertos, cegados en su mente tapada. Años de acero, templados en el silencio mediático, afilados en la palabra nunca hecha mensaje de conexión exterior, hasta que llega el segundo de fuerza, fruto de labor callada en palabras de mirada. Nunca fueron años templados por la bondad de los acontecimientos, antes al revés, fueron años de carbón, fuego, martillo, yunque y agua; años de la forja y templanza del hierro que era nuestro estar vivos en las fraguas de Vulcano, allí donde despertó nuestro espíritu del sueño de los malditos, por el repiqueteo del hierro contra el hierro hasta ser transformado en duro acero.



LUG, el señor de los mil nombres, el herrero de los dioses, este fue nuestro primer Caminante de la Aurora. Aquel que dio forma al duro metal, fue quien nos sopló ese primer aliento en nuestros vacíos pulmones. Él también será el que recibirá nuestro último hálito de vida, para algún nuevo guerrero por el Alma Eterna de nuestro Pueblo de Dioses y Hombres, en las milenarias tierras de Europa.

Años de acero en yelmo, escudo y espada. “Debotio hispánica”, cuando el honor era morir por la sangre del Señor de los Libres, siendo enterrado como hombre Libre con su espada, o al morir en el campo del honor, dejar que los buitres elevasen el alma del guerrero al cielo de los dioses, siendo después enterrados los huesos descarnados junto a sus armas, la principal de todas, su espada de Hombre Libre.

Hay una crónica pendiente de aquellos años, en los que constituyeron nuestros remotos ancestros todo el cuerpo de un ejército, que consiguió derrotar al más grande imperio del Mundo Antiguo, con el que casi pueden torcer el rumbo de la Historia de la mano de un general extranjero. Celtas y Celtíberos de largas gladius e Íberos de míticas falcatas. Desconocidos guerreros de un ejército donde fueron capaces de derrotar a las legiones romanas a las mismas puertas de Roma.



Todos los años pasados fueron un duro banco de pruebas y selección de Hombres. Aprendices en manada de lobos. Águilas solitarias de aguda mirada, campan por sus pechos, al volar sobre nuestras moradas. Lince felino de caza silenciosa para su camada. Uros, búfalos y bisontes de las largas llanuras en míticas grandes manadas, dadoras de vida en los gélidos años, transformados en los cortos meses del año recién empezado. Años glaciares cuando llegaron los primeros pobladores. Duros de clima y ricos en circunstancias. Fundaciones e inicios sobre mitos y realidades ani males. Todo inicio es agónico, como un parto.

Años de piedra, cobre y bronce forman casi dos tercios de la historia. Años de hierro y acero evolucionario, en los comienzos de los hechos escritos. Nuestro, y solo nuestro, como origen.


Hoy como ayer proseguimos con la misma praxis lineal, en este mundo cobarde y avaro, nos ha tocado sobrevivir. La madre es el eje de la familia, como dadora de vida, como protectora del nido, como refugio del hombre agotado, como…, mujer es mujer, como muy distinta del hombre. Mientras podamos mantener a nuestro lado a la mujer, aun permanecerá con nosotros un futuro posible, parido de su vientre y conservado con nuestro valor.

Años de acero, origen y causa de nuestra lucha existencial. Soporte de la memoria honrada hecho en casco de milicia. Ahí donde son hermanos el estudiante y el obrero, el intelectual y los que trabajan el campo, el comercial y el emprendedor, todos los que son y sienten lo que son, más allá de su situación particular. La fuerza del grupo cohesionado, por las ganas de vivir en un entorno mejor, sin el miedo a morir en el intento. TODO O NADA.

El faro del horizonte anuncia la próxima orilla en la oscuridad de la noche; esperanza confirmada por el trabajo en el callado silencio de las horas.
Uno Preparación
Dos Entendimiento
Tres Asociación
Se ven los albores del día en la hora más fría que precede al alba. Se intuye. Se anuncia. Y llega.
Cuatro Comunicados
Cinco Documentos
Seis Reconexión
Diana cazadora, diana del nuevo día. A la luz joven parece recién creado todo el mundo que se descubre a su imagen.
Siete Propaganda
Ocho Movimiento
Nueve Apoderación
Toma de fuerza, para tomar por la fuerza lo que depare el nuevo día. Ahora ya puede continuar la historia en la noche interrumpida.



Crece la frontera por la intensidad de la línea marcada. Veo la frontera invisible de la diferencia.
Tierra que sustenta.
Aire que llena los pulmones.
Agua del origen existencial.
Fuego de cuerpo y mente.
Hemos de tener fe en nosotros mismos para que nuestros hermanos puedan tener fe en nuestro futuro común. Una nueva forma de comenzar a ver las cosas se impone más allá de mentiras nunca piadosas, sobre la faz de esta heredad eterna.

Miseria para todos aquellos que no pusieron reverencia al pronunciar la palabra. Quien escribe lo ha de hacer desde el calor de la sangre viva hecha tinta, para decir la Verdad.

AÑOS DE ACERO FRENTE AL HIERRO. YUNQUE Y MARTILLO.
AÑOS DE DIAMANTE FRENTE AL CARBÓN. FUEGO Y PRESIÓN.

Años de Acero me templaron desde el segundo instante de tener vida, el primero fue para el generoso Dios, en una mirada agradecida. Dicen que la fuerza que no me destruye, acaba por cederme su fortaleza y hacerme más templado en mi dureza. Razón tienen. Oír al maestro, es, tener parte del camino recorrido. Si hay un guía, dejemos su puesto libre al frente. No hay deshonra en ser y actuar como seguidor de quien habla y actúa con conocimiento, si hay un aprendizaje por nuestra parte. Nacemos con inteligencia, la Sabiduría es fruto de la observación y de unas experiencias a compartir por los observadores.

Mis hermanos nos esperan, quizás no lo saben aun, pero así es. Cuando una luz brilla, ilumina el cielo para todos, aun los dormidos y cegados por el hado que les fue impuesto sin voluntad.

AÑOS DE ACERO Y DIAMANTE NOS AGUARDAN EN UN MAÑANA HECHO HOY DE PASO EN PASO POR SU TIEMPO.





04 / OCTUBRE / 7515

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